La soledad en hombres gays muchas veces no se nota desde fuera.
Hay planes, fiestas, ligues, mensajes, redes. Pero cuando todo eso se apaga, aparece un silencio que no siempre sabemos sostener.
Un hueco. Una falta. Una sensación de vacío que ni el sexo, ni las apps, ni la validación consiguen llenar.
Desde la Terapia Gestalt y la terapia afirmativa LGTBIQ+, trabajamos con muchos hombres que viven rodeados de estímulos, pero profundamente solos por dentro. Y eso también es una herida.
¿Qué tipo de soledad es esta?
No es solo “no tener pareja”.
Es una soledad más existencial, más honda. Que puede manifestarse como:
- No sentirte realmente visto o entendido.
- Compartir sin conectar.
- Evitar el silencio porque duele.
- Buscar sin encontrar.
- Estar rodeado de gente, pero sentirte fuera de lugar.
En muchos casos, la soledad en hombres gays es consecuencia de años de ocultamiento, protección y validación externa.
¿Por qué se sostiene en el tiempo?
Porque hemos aprendido a mostrar una versión editada de nosotros mismos.
Porque a veces elegimos vínculos que no nos cuidan, pero nos distraen.
Porque confundir compañía con contacto es fácil cuando vivimos desconectados del cuerpo y del deseo auténtico.
Además, la cultura gay muchas veces premia la superficialidad, la imagen y el deseo inmediato. Pero no siempre da espacio al vínculo real, a la ternura, a la presencia.
Subtítulo H2: Soledad en hombres gays y terapia: empezar a habitarte de nuevo
En la Terapia Gestalt, no llenamos tu vacío desde fuera. Te acompañamos a mirarlo, a sostenerlo, a escucharlo.
Porque a veces, lo que necesitas no es más ruido, sino más contacto contigo.
En sesión trabajamos:
- La desconexión emocional que arrastras desde la infancia.
- La compulsión al hacer, al gustar, al buscar.
- La dificultad para estar contigo sin exigencias.
- El miedo a mostrarte vulnerable, incluso contigo mismo.
La soledad no siempre es falta de gente
A veces es falta de uno mismo. De presencia, de verdad, de contacto interno.
Y eso, con tiempo, se puede transformar.
No desde la corrección, sino desde el cuidado, el permiso y el acompañamiento.
Puedes pedirme cita
Si sientes que hay una soledad que no puedes nombrar, que no se va aunque estés acompañado, o que algo en ti necesita ser mirado de verdad, puedes pedirme cita.
Trabajo desde la Terapia Gestalt y la terapia afirmativa para hombres gays y personas LGTBIQ+, en un espacio sin juicio donde no tienes que aparentar nada.